El sueño español va perdiendo atractivo

MERCADOS

David Zorrakino | EUROPAPRESS

España baja puestos en el ránking de los destinos favoritos entre los trabajadores de todo el mundo. La calidad de vida y la cultura, nuestras principales bazas

04 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Hace ahora diez años, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) realizó el primer estudio sobre el impacto fiscal de los inmigrantes en los países europeos. En aquel momento se comprobó que los extranjeros contribuían más en impuestos de lo que recibían de beneficios sociales. Pero había una pega: la contribución fiscal neta de los inmigrantes era menor, porque su papel en el mercado laboral era bastante precario. Desde entonces, esa presencia de extranjeros en la Unión Europea ha ido cambiado. Según la misma OCDE, ahora «han alcanzado niveles educativos más altos y provienen de países más diversos». En España representan el 17,8 % de la población total ocupada, según datos del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Frente a lo que se pueda pensar, la mayoría de ellos trabajan en el sector servicios, después en la construcción, en la industria y, por último, en la agricultura.

¿Por qué eligen nuestro país? Hay diversas razones. El estudio Decoding Global Talent recoge anualmente datos globales sobre la empleabilidad, la disposición para trabajar en el extranjero y los motivos para buscar empleo en según qué país. A partir de ahí, elabora un ránking de los destinos más atractivos para los trabajadores de todo el mundo. España ocupaba el puesto número 8 hace diez años. Escaló hasta el número 6 en el 2018 , y en esta última edición ha vuelto a bajar hasta el 10. «España perdió atractivo durante la pandemia, al verse especialmente afectada», explica el informe, que precisa también que es un destino escogido sobre todo por los encuestados de otros países europeos. Por ejemplo, ya es la cuarta opción para los alemanes. Y además, los encuestados de Latinoamérica dan prioridad a España por el idioma que comparten.

Según los datos que ofrece el estudio, la calidad de vida y el clima son los factores más valorados a la hora de elegir nuestro país para emigrar. España también obtiene la mejor puntuación del ránking en «nivel de acogida e integración» con los que vienen de fuera. En el lado contrario, el aspecto profesional como tal no resulta demasiado atractivo. Los extranjeros no valoran especialmente las oportunidades de trabajo que pueda haber aquí, ni la seguridad, ni tampoco los aspectos fiscales o el coste de vida. Ni siquiera la atención sanitaria —la peor puntuada del Top 10— , a pesar de que España alberga uno de los mejores sistemas sanitarios del mundo.

De entre todos los países del mundo, el favorito para marcharse a trabajar es Australia. La economía australiana ha experimentado un auge de empleo tras la pandemia, con salarios bastante elevados y una gran demanda de talento. Esto llevó al país a un aumento récord de las cifras netas de inmigración: más de medio millón de personas por año. La parte de arriba del ránking la completan Estados Unidos y Canadá, destinos favoritos en pasadas ediciones. Reino Unido y Alemania son las opciones elegidas a este lado del Atlántico. Ambos países se han esforzado por simplificar la entrada de trabajadores cualificados. En el caso británico, introduciendo nuevos visados; y en el caso alemán, con una nueva ley de inmigración.