El menor que mató a su madre en Badajoz, internado en un centro para recibir terapia

M. C. C. REDACCIÓN

ESPAÑA

Un coche de la Policía Nacional en la calle donde un menor ha matado a su madre tras una discusión
Un coche de la Policía Nacional en la calle donde un menor ha matado a su madre tras una discusión Andrés Rodríguez | EUROPAPRESS

Discutió con su progenitora por un perro, al que también acuchilló

03 may 2024 . Actualizado a las 19:42 h.

El menor de 17 años que acabó con la vida de su madre el jueves en Badajoz quedó ingresado, de manera preventiva, en un centro terapéutico mientras se instruyen diligencias por este caso que ha conmocionado a la ciudad extremeña. Todo ocurrió a la hora de comer del jueves, cuando el joven, que había sido adoptado años antes, llamó al 091 para confesar que había matado a su progenitora. Al parecer, habían discutido y el menor atacó a la mujer con un cuchillo y le provocó heridas que acabaron con su vida. Todo apunta a que el chico debió tener un brote violento, ya que también degolló a la mascota familiar, un perro con el que convivían.

El animal pudo ser el motivo de la discusión familiar. El joven acabó primero con la vida del can, lo metió en una caja y lo depósito en un contenedor de la calle. Luego volvió a su domicilio en la calle América y esperó a su madre. Carmen Tejero Cano, de 60 años y maestra de profesión, salió de dar clases en el colegio y se fue a su casa donde se encontró con su hijo. Según indicó posteriormente el menor en su llamada a la Policía Nacional, discutieron y la acuchilló. La mujer recibió seis navajazos.

El adolescente se cambió de ropa. Se puso un traje y salió a la calle donde le vieron algunos vecinos. Fue entonces, a las 14.35 horas, cuando decidió llamar a la policía y contar lo que había pasado. Los servicios de emergencias llegaron rápidamente a la zona, pero Carmen había perdido demasiada sangre y no pudieron hacer nada por ella. Los agentes detuvieron al menor que ingresó en un centro terapéutico tras pasar a disposición judicial.

Una persona normal

Los conocidos y amigos de la víctima mostraron su sorpresa por lo ocurrido. «Era un chico muy normal», señaló un vecino del inmueble. Estaba a punto de graduarse en el instituto y no había tenido problemas que se conociesen en su entorno. Su madre había acudido la mañana del crimen a dar clases al colegio Los Glacis, donde llevaba años trabajando como tutora de Primaria. Este curso estaba al frente de los alumnos de tercero.

Carmen había adoptado a dos menores, el que acabó con su vida y a una niña. Vivían en la casa donde fue apuñalada. «Todavía me emociono cuando recuerdo la primera vez que abracé a mi pequeña. Se me pone la carne de gallina», explicaba hace cuatro años en redes sociales, cuando confesó que esa experiencia le había cambiado la vida. «Ahora soy más feliz», reconocía.

Un episodio de matricidio similar ocurrió el pasado 8 de febrero en Cantabria, cuando apareció el cadáver de una mujer dentro de un vehículo en un garaje de Castro Urdiales. Los investigadores detuvieron a los dos hijos adoptados de la mujer encontrada muerta, uno de 15 años, que fue ingresado en un centro de menores y otro de 13, que es inimputable al ser menor de 14 años.